Cualquier servicio que se ejecute en una máquina virtual conlleva un potencial de ataque. Al desactivar los componentes del sistema que no son necesarios para admitir la aplicación o el servicio que está en ejecución en el sistema, se reduce ese potencial.
Las máquinas virtuales no suelen precisar tantos servicios o tantas funciones como los servidores físicos. A la hora de virtualizar un sistema, evalúe si es necesario ese servicio o esa función en particular.
Nota: Cuando sea posible, instale sistemas operativos invitados mediante los modos de instalación "mínimo" o "básico" para reducir el tamaño, la complejidad y la superficie de ataque del sistema operativo invitado.